Ciencia, Tecnología y Gobierno - Murray N. Rothbard

 

En esta ocasión traigo un ensayo de Murray N. Rothbard, el padre del Anarcocapitalismo sobre Ciencia, Tecnología y Gobierno. En este ensayo, Rothbard analiza cuál debe ser el papel del Estado en la investigación y desarrollo científico.

Para empezar, debemos considerar el principal problema de la economía, que es la asignación eficiente de recursos escasos. En un mundo ideal de recursos infinitos, podríamos dedicar todos nuestros esfuerzos en todas las áreas de la vida humana, pero la realidad demuestra que esto es imposible. Por eso, si pensamos que se necesita más investigación científica y el Estado interviene aumentando los recursos hacia esta actividad, por definición, tenemos que extraer recursos de otras áreas. Esto, es totalmente ineficiente, por lo que la cuestión que se plantea en el ensayo, es ¿Cuántas personas y capital hay que dedicar a la ciencia y la tecnología?

El problema de la ciencia y la tecnología, genera dos problemas en una sociedad, el primero es cuántos recursos destinar a la ciencia y el segundo es cuántos recursos destinar a la ciencia militar. En el primer problema hay que tener en cuenta que más para la ciencia es menos para otros sectores y en el segundo, al ser monopolio de un Estado (el Gobierno nos quita recursos vía impuestos para el sector militar y protegernos de los enemigos interiores y exteriores) tiene el problema comentado en el párrafo anterior de cómo debe actuar el Gobierno.

Como en cualquier actividad de la sociedad, la participación directa del Estado crea ineficiencias y distorsiones en el mercado. Al igual que el Estado no se mete a producir directamente bienes materiales, la opción más preferible es que con el presupuesto público, contrate y deje en manos privadas la producción de bienes militares. Es decir, su papel sea de consumidor y nunca de productor. Esto también aplica al personal científico, siempre es mejor que lo contrate en empresas privadas. La realidad es que solamente las mentes libres y sin restricciones de ningún tipo son capaces de conseguir los mayores avances en al Ciencia.

En el capítulo tres, trata de la escasez de científicos y cómo se puede remediar, queda claro que cuando el Estado entra a solucionar un problema vía subsidios o subvenciones, no solo no arregla el problema, sino que lo agrava y crea otros. Un ejemplo, de otro campo, España y su protección a los inquilinos y persecución de los propietarios con medidas como la regulación de alquileres, la no expulsión de los inquilinos en caso de desamparo, etc. Su efecto, es que la oferta de pisos ha disminuido allí donde se han aplicado sus medidas, han crecido el número de impagos y ocupaciones ilegales y en última instancia, familias con hijos tienen más difícil alquilar pisos. Otro ejemplo de a más Estado más problemas.


Murray Newton Rothbard (1926-1995)

Interesante es la aportación sobre la educación, que para ser un libro escrito en los años 50 es muy actual a los tiempos de nuestros días. Comenta que el Estado solamente se preocupa de dar una educación encorsetada, que frena el desarrollo del aprendizaje y las habilidades de las personas, igualando a todos al nivel más bajo, aprobando a todo el mundo y dejando que los vándalos entorpezcan las ganas de aprender del resto. Por eso es importante entender, cosa que la lógica socialista no entiende, que hay jóvenes no educables, porque no quieren aprender y serían más felices si lo más pronto posible, se orientasen a un oficio que les llene y les realice personalmente.

Otra idea importante que nos deja este libro, es la del inventor individual en contraposición de la investigación dirigida y planificada por el Estado. Un inventor necesita libertad para llevar a cabo sus ideas y en un mundo de libre empresa, no le faltan formas de mantenerse y financiarse. Además, cuando se dan estos condicionantes de libertad, las ideas fluyen y son aprovechadas por unos y otros para hacer descubrimientos. Citando a John Randal Baker, pone el ejemplo del cáncer de prostata: "Nuestro conocimiento moderno de cómo controlar el cáncer de prostata se debe a las investigaciones de Hunter, Gruber, Griffiths, Steinach y Kun sobre la próstata; de Grosses, Rusler, Davis, Baaman y Riedell sobre la fosfatasa y de Kuthcer y Wolbergs sobre la fosfatasa en la próstata. Ninguno de estos hombres estaba estudiando el cáncer, pero, sin ellos, el descubrimiento del nuevo tratamiento no se podría haber realizado. ¿Qué planificador central, interesado en la cura del cáncer, habría apoyado a Griffiths en sus estudios sobre el ciclo estacional del erizo o a Grosser y Husler en su trabajo bioquímico sobre la membrana de revestimiento del intestino?¿Cóm podría alguien haber conectado la fosfatasa con el cáncer cuando se desconocía la existencia de la fosfatasa? Y aunque aún no se sabían, ¿cómo podría quien tuviera a su cargo los fondos destinados a la lucha contra el cáncer haber sabido a quién dar dinero para la investigación? Ningún planificador podría hacer las conjeturas correctas"

Otra muy buena frase del libro que tiene mucha actualidad es la siguiente: "El control gubernamental de la ciencia y la planificación gubernamental de la ciencia tienen como resultado la politización de la ciencia, la sustitución de los objetivos y criterios científicos por los políticos." Esto se puede ver en la forzada agenda 2030 que nos intentan meter con calzador y el gran apagón del 28 de abril de 2025, que a pesar de la evidencia que fue el mix de energía, los objetivos políticos se ponen por delante de la realidad científica y se miente. Como queda demostrado que tras el incidente que nos tuvo 12 horas sin luz en toda España y Portugal, el mix de energía volvió a cambiar dando prioridad a las energías que dan estabilidad al sistema y reduciendo las energías renovables.

Una de las últimas ideas que tiene el libro, es la diferenciación entre un subsidio y una exención de impuestos, parecen equivalentes pero son muy diferentes. Un subsidio, retrae recursos de una parte de la población (penaliza) para dárselo a otra (favorece), aumentando la intervención y el poder de control del Estado (cuanta más gente cobrando un subsidio, más gente dependiente del Estado). Sin embargo, una exención de impuestos, reduce las cargas fiscales, deja más dinero en el bolsillo del contribuyente y reduce la intervención del Estado. Por eso, siempre es preferible una exención de impuestos.

Como última idea del post, quiero hablar de la automatización, generalmente se ha creído que la automatización destruye el empleo, pero esto no es así, como se puede comprobar desde la era de la Revolución Industrial. La realidad es que el avance tecnológico en una industria, si su demanda es elástica, genera productos más baratos y menores costos que estimulan el crecimiento de la industria y su necesidad de empleo, en el caso de que la demanda no sea elástica, la reducción de necesidades en dicha industria generará desempleo, pero la reducción de costes liberará recursos en los consumidores, que podrán gastar en otras industrias que deberán incrementar su empleo.

Como reflexión final, como bien dice el Profesor Bastos, estas ideas son contra intuitivas, por eso son difíciles de asimilar por la gente si no tiene un mínimo de conocimientos. Cuesta ver que la mejor manera en economía para resolver un problema, no es que el Estado intervenga más, sino dejar a la sociedad libre y al libre mercado asignar los recursos de la manera más eficiente, esto lleva tiempo hasta que se reajusta la economía y por eso cuesta tanto verlo. Por poner un ejemplo, en el problema de escasez de vivienda actual, es más fácil pensar en un subsidio del Estado a los jóvenes para que puedan alquilar (aumentando su dependencia del Estado) que pensar en medidas como liberalización de suelo para construir, reducción de impuestos a la construcción de vivienda y compra-venta, regulación a favor de la propiedad privada (para favorecer el incremento de oferta de pisos en alquiler), etc.

Para más.....


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